En el barrio existe una cosa…
.Que a los atardeceres nostalgia.
A las cuadras les roba el alba,
.y como el pasado les corre la cortina.
A los enamorados aclama,
.y los jardines presurosos se esmeran.
Para obsequiarles jazmines y rosas,
.para perfumar su caprichosa renuencia.
A veces... en noches aciagas,
.parece, que una suave voz llama,
Nunca abandona a los que elige,
y al amor melodioso le canta..
La suburbana melancolía se expresa,
.sembrando con misterios las veredas.
Los duendes les abren sus puertas,
.recibiéndola como ángeles en ruinas.
La felicidad es un incipiente nómina,
.que de a poco se encolumna.
Opta por ser la pionera,
.en una fila de intensas contiendas.
Un sutil música arrastra las sombras,
.persuasiva como una palabra...
Se va tragando los males trepidantes,
.y azota a las almas perdidas...
En el fondo... una ventana,
.permite escapar azules estrellas.
Es el festejo de la verdadera vida,
.que del dolor no hace opulencia.
Palacios de cristal se asoman,
.para aclamarlos en una esquina.
A un tango y una honrosa guitarra,
para darles la bienvenida...
La burbujas del champán embriagador,
.son aves, que por los callejones vuelan.
Echan a patadas a la desgracia,
.y con los mansos fantasmas se amigan...
Amigo…cuando la bienaventuranza convida,
.el barrio es todo una fiesta.
Se van apagando las luces oscuras,
.mientras dos amantes a la Luna lloran… Daniel H Guasti
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