Es vivo como un cuadro,
no conozco su edad , ni años,
solo se que una vez,
fue fabricado..
Ambos habitamos el mismo espacio ,
el mismo tiempo….
El mismo espanto….
Soy yo del otro lado,
me retiene en lo virtual...
Muchas risas , algún día ,
muchos llantos….
Por él pasaron ,
mil caras …muchas…
Y siempre,….
El mismo piano,
a su lado…
Presenció rincones,
juegos y aplausos…
No se anoticia,..
por ser drástico...
Nunca supo de ciencias,
ni de abecedarios…
Fue alguien…
Un extraño,
luces… y rayos…
Tuvo a su merced,
a ladies y príncipes,
un labriego cansado,
un “paje” pisano,
un sol de antaño…
Los tiempos pasaron...
y siguió ahí,
colgado y solitario…
Brilló como una joya,
de un tesoro encontrado,
Desconoce lo trascendente,
porque lo ha ignorado...
No le importa ,
su existencia,
tan corta,
y la historia...
Pues no tiene edad,
ni deseos ,
ni alma ,
ni conciencia...
Es como la sal...
La arena...
La paz infinita…
La nada ...
Pasaron los años ,
y siempre estuvo ahí...
Colgado...
Solitario...
Sin quejas,
ni engaños…
Esconde una gran sabiduría,
obtenida de una vieja roca…
Si alguien lo enfrenta,
se verá a si mismo,
su propia cara,
y su boca…
Sin embargo,
hay algo que nos asemeja,
Pues…igual que nosotros,
en sus interiores , vibran,
anónimas moléculas,
como desesperadas,
por nostalgiosas,
de volver a ser estrellas...
Solo sabe dar,
sin saberlo,
y con paciencia,
Por eso...me apiado de él,
y en cierto modo…
yo por un espejo,
solo tengo… penas...
Daniel H. Guasti
pisulinoal@yahoo.com.ar
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